Biodeterioro de la madera

¿Qué es el biodeterioro de la madera?

La madera es uno de los materiales más antiguos utilizados por el hombre, ya que es ligera, fácil de manejar, resistente y renovable.

Sin embargo, al ser natural, es tanto más susceptible a los daños causados por insectos y microorganismos. Los daños más importantes los causan los hongos lignívoros, es decir, capaces de destruir los polímeros complejos de la madera. Los insectos comedores de madera (termitas) o los insectos con larvas comedores de madera (escarabajos capricornio) también pueden causar muchos daños.

Existen diferentes tipos de ataques fúngicos: podredumbre fibrosa, podredumbre cúbica, podredumbre blanda, mancha azul y moho.

Existen más de 200 variedades de hongos que pudren la madera, de las cuales la más conocida y temida es la mérula o Serpula lacrymans. Esta especie, que rara vez se encuentra en los bosques sino más bien en las casas húmedas, provoca la podredumbre roja, sobre todo en las coníferas.

En las últimas décadas, la madera ha sido sustituida por otras soluciones como el hormigón, el PVC o el aluminio. Éstas son más duraderas.

El reciente auge ecológico vuelve a favorecer el desarrollo de la madera, ya que atrapa el CO2 y es renovable.

¿Cómo se contaminan los bosques?

Dependiendo del grado de humedad, la madera será más o menos atacada por los microorganismos.

 


Antes de considerar el tratamiento, es útil determinar la naturaleza exacta de los riesgos a los que estará expuesta la madera para seleccionar el conservante y el proceso de tratamiento adecuados. En función de los riesgos, las técnicas de tratamiento pueden ser más o menos eficaces. Los procesos de pulverización, cepillado e inmersión se utilizan para los tratamientos superficiales del material, mientras que las técnicas de presión al vacío se emplean cuando se requiere la impregnación del núcleo...

Históricamente, los productos de degradación se han clasificado en tres familias principales:
- alquitranes y aceites
- productos orgánicos
- sales metálicas

ORGANCIDE 14 puede utilizarse para tratar madera infectada.

Para evitar las infecciones fúngicas, los extremos de los troncos de los árboles pueden recubrirse previamente con una capa impermeable, a menudo fabricada con derivados fenólicos. Uno de los más antiguos es la creosota, un alquitrán producido por la destilación del carbón. Sin embargo, algunas especies de hongos son resistentes a ella, como Lentinus lepideus y Cladosporum resinae.